opinión Natalia Saavedra Stange
Siempre he criticado que en Chile hay poca promoción hacia el deporte. Y si bien no es algo contemporáneo hubo décadas en las que sí se veía movimiento. Me refiero a la importancia que se le daba a la actividad física durante la primera mitad del Siglo XX cuando se celebraban las “Revistas de Gimnasia”.

Eventos públicos y sociales en los que deportistas preparaban demostraciones masivas para incentivar el desarrollo de esta área dentro de los espacios escolares y clubes deportivos. Fomentaban valores de fair play y competitividad.
También el tiraje de publicaciones deportivas como la revista “Los Sports, Mach o Estadio” que incluían artículos y reportajes que ahondaban en el juego y hablaban de nuevas disciplinas introducidas al país.
Una serie de factores que transformaban al deporte en un movimiento socio-cultural que hoy no tiene la misma fuerza del pasado -sin duda- por falta de información. Lógico sería que el Ministerio del Deporte, en su calidad de novato, cambiara este panorama. Lástima que en menos de dos años desaprovecharon grandes instancias como los Odesur para fomentar y movilizar a la gente, en especial a los niños, a los estadios y recintos deportivos.
Sin embargo, hoy se han reivindicado, pues amoldándose a los nuevos tiempos han acertado con la creación de la aplicación EDI, que permite encontrar las Escuelas Deportivas Integrales más cercana a la ubicación de cada uno. Incluyendo actividades gratuitas para niños, junto con una completa información de los recintos, períodos de clases y bloques horarios.
Buen comienzo para fortalecer y masificar la actividad física ¡Vamos por más!